Señora de la asociación de Puntaires de Terrassa haciendo bolillos. |
Como el año pasado, no pude asistir, creí que con 2 horas tendría la feria vista, pero me equivoqué. Era más grande de lo que me pensaba, y me perdí entre tanto expositor, y cosas maravillosas que "necesitaba" jajajaja.
Antes de entrar al recinto, en pleno aire libre, encontramos ya expositores varios, una zona de market, donde podíamos comprar alimentación ecológica, embutidos, dulces, etc. Y también algún puesto de productos hechos a mano.
Las partes laterales, estaban llenas de food trucks, donde podíamos hacer un alto en nuestra visita y degustar, todo tipo de platos.
Y antes de entrar, expositores de wedding, de todo para organizar bodas.
El area se divide, en zonas. La primera zona que nos encontramos nada más entrar , es la zona del papel, una de mis preferidas por cierto. Allí podías comprar todo para el scrapbooking, sellos, tintas, cortadores, reglas, pinturas, ojales, etc. Yo iba con la idea, entre otras, de comprarme un kit para hacer mis propios sellos, me costó de encontrarlo, habían muchísimas cosas, y no lo encontraba por ningún expositor. Pero al fin, vi la luz y lo encontré en el stand de Conesa.
Y luego me volví a perder entre tintas, washi tapes, fornituras, cortadores, herramientas, sellos, libros...
Los pastelitos que vereis a continuación, aunque parezca mentira, no se comen, forman parte del Stand Kirei. Es una técnica japonesa que se hace con una masa, y quedan así de monos (en un par de meses es mi cumpleaños, no digo más)
Otra de mis zonas preferidas, la zona de hilo. Telas para patchwork, agujas, pasamaneria, fornituras, maquinas de coser, lanas,... puff, todo lo que se necesita para nuestras creaciones. He de decir, que eché en falta hilos de bordar, fue, lo único que no encontré.
Una zona de cocina, con la idea de " hazlo tu mismo", podemos encontrar talleres de pan, kits para hacer cerveza, talleres de cocina, comida ecológica, etc.
Una zona infantil, dedicada a los más pequeños, con ropita y juguetes. Otra zona de bricolage, donde la jardineria, los muebles artesanales, pinturas y herramientas eran los protagonistas.
Me llamó la atención el Stand de Bamboo bikes Barcelona. Un nuevo concepto de bicicleta urbana, producidas de manera artesanal, en Barcelona con materiales sostenibles como el bamboo.
Una zona atelier, para todo aquel que quisiera aprender alguna técnica, tanto de cocina, como de estampado, tejido, etc. Además este año, el Handmade Festival estaba dedicado a Japón, por lo que los talleres tenían esa temática.
En la zona " Aires de Japó", podías comerte un yakishoba, un mochi, hacerte la manicura de gel, comprar teteras artesanales o ver exposiciones como la de los preciosos kimonos.
A parte del atelier, en los propios stands, se impartían diversos talleres y demostraciones, la mar de interesantes. Fue muy divertido, pasear por allí y ver a la gente en acción.
En resumen, para mi sorpresa, me gustó más de lo que yo pensaba. La oferta era bastante variada y muy interesante. El próximo año, me pido el día libre, pero me faltó tiempo, y me perdí algunas charlas a las que me hubiese gustado asistir.